El argumento principal del evento giraba alrededor de la coronación del rey y todas las tramas políticas que habría alrededor de esa trama central. Como punto de partida importante la destrucción que desoló Curlayn en Ejen 2003. La llegada de los enanos desde el norte a las montañas blancas, la muerte de la inmensa mayoría de los comerciantes y los posibles rumores de traición de la cabeza de la iglesia de la Sagrada Palabra.
Casa real. Qaothem:
Al principio de la partida, dicha familia recibe una mala noticia con la muerte de la regente de la casa hasta la llegada del príncipe a la ciudad. Se extienden rumores sobre la presencia de un asesino contratado en el contexto de la trama del regente de la casa de la Sagrada Palabra. El verdadero asesino es Deladras de Ardas, general de los ejércitos de Ardas. Dicho cadáver es descubierto oficialmente tanto por el general como un compañero llamado del frente ( otro general ). La familia asume como regente al propio rey, que finalmente es coronado Rey y contrae matrimonio, contra toda tradición, con una plebeya.
Casa de Ardas:
La casa de Ardas está sumamente dividida. El único legítimo es Gildor de Ardas, el supuesto hijo bastardo (Chema) quiere acceder a la cabeza de la casa quitando por las buenas o por las malas a su hermano rompiendo o no los tratos ya concebidos en la anterior Ejen. La mano derecha del rey en el frente nombrada por él como regente temporal de la casa de Ardas también aspira al control de dicha casa, pues él no es noble (Damur).
El general Deladras creyendo estar en una situación caótica y no soportando la idea de que un pelele como Gildor llegase a controlar la casa llama al compañero del frente general (Curro) para que le apoye en un supuesto golpe contra la cabeza de la casa. Deladras mata tanto a Taeron Raitra como a Shanara de Quaothen creyéndole traidores a la ciudad. El rey interviene en la situación de la casa ante la amenaza de que los ejércitos de élite de la casa de Ardas se revelen contra su poder dictaminando que Gildor no puede ser regente de la casa pero que su línea sucesoria sí lo será. Dicha línea será entrenada por el actual regente, la mano derecha del rey (Damur) y Gildor se retirará a un monasterio. El general Deladras queda satisfecho y vuelve a jurar lealtad al rey.
Casa Harikoon:
Los incidentes causados en la Ejen 2003 desfavorecen a la casa Harikoon socialmente y sobre todo contra la casa de la Sagrada Palabra por acusaciones de herejía. No en vano gana muchos amigos con los elfos y los enanos y aumentan sus contactos con el resto de casa. Le ayuda a ello la desaparición de Shanara Qaothem y la desaparición política de Gildor Ardas. En sus numerosos contactos tanto con el gremio de comerciantes recién recuperado y con la ayuda del poder que ostenta dicha casa en la casa Verlaasha intenta aumentar su poder haciendo ( desaparecer ) a alguno de sus enemigos siendo denunciado por parte de la ciudad habiéndose realizado juicio y no habiendo encontrado causa suficiente para encontrar culpable a Erralek de Harikoon, el rey, que también es consciente de las tensiones que provoca la presencia de Erralek en ciertos sectores de la casa de Ardas decide desterrarlo temporalmente de la capital pero conservando su título nobiliario y dinero. La casa de Harikoon queda descabezada pero no sin poder.
Casa Verlaasha:
La casa Verlaasha pierde prácticamente todo el poder al ser abducida por la casa Harikoon de cual se vuelve totalmente dependiente al no haber una cabeza fuerte de familia que defienda los intereses de la misma. La familia tenía pretensiones para la boda entre una de sus miembros y el propio rey pero con la negativa el rey mismo provoca la caída de la casa, los juicios son tomados aún en consideración y llevados por la propia casa Verlaasha, pero es prácticamente el último reducto que queda de la casa de sabios.
La Sagrada Palabra:
La sagrada palabra tendrá un papel relevante dentro de la partida Ejen 2004 con el fallecimiento de Taeron Raitra y la desaparición del primado de la casa y de la iglesia se abre un tiempo de inestabilidad dentro de la casa de la familia. Los miembros más radicales dentro de la iglesia de ven consternados con las actitudes del rey pues deja la entrada libre a seres indómitos, extraños y que rozan la herejía por la utilización de magia, algo prohibido por la casa de la sagrada palabra. Así pues empieza una caza de brujas contra ciertos miembros tanto de la ciudadanía normal como de los “visitantes”. Acosan al rey deliberadamente para que endurezca sus medidas contra éstas criaturas, para que no permita que éstas criaturas vaguen por la ciudad a su libre albedrío, si al menos no les dejan quemarlos, por lo menos que sean detenidos y llevados ante la justicia. El resultado de esta caza de brujas es la quema del torreón mayor de la ciudad llevando consigo a dos víctimas y un intento de asesinato a la comunidad elfa por completo, venida de Menozar. En ese acto también mueren dos miembros de la Sagrada Palabra. Mientras tanto, en otra parte de la ciudad uno de los miembros de la sagrada palabra es quemado mágicamente mientras que el resto de sus acompañantes son heridos por el mismo acto (este acto será llevado a cabo por el cabeza de familia de Yar Phalas)
Enanos:
La misión fundamental de los enanos era la recuperación del martillo sagrado que cedieron a Erralek de Harikoon en nombre del clérigo enano que acudió a la ciudad de Curlayn en representación previa. La segunda misión era establecer negociaciones directas con el rey, negociaciones que debieron darse con el anterior emisario, pero que se frustraron a su muerte. Al final las negociaciones culminaron con la recuperación del martillo y con la promesa de la reconstrucción de las murallas de Curlayn a manos de un pequeño contingente de 500 enanos. Por contrapartida la misma raza tendría toda la libertad para reclamar las dos ciudades que fueron ocupados por los enanos en el suministro de hierro y la apertura del comercio por éste mineral tan importante con la capital.
Mensajeros de Narbell:
Otro punto importante era la visita de los mensajeros de Narbell. Éstos mensajeros tenían como misión negociar con el rey la importancia de la reconstrucción de las rutas comerciales y de la posición política de su ciudad. Con respecto a la sagrada palabra hay que resaltar que fueron capturados y torturados por ellos siendo la mensajera la propia personificación de Ylius. Después de haber sido torturados, el propio dios se hizo presente para hacer valer a su mensajera como nueva suma sacerdotisa de la Sagrada Palabra. Finalmente el rey cede tanto a la posición de la nueva sacerdotisa por boca de la sagrada palabra como a las exigencias de sus mensajeros en la toma del poder de Narbell.
Mensajeros de Idrinor:
Dichos mensajeros tenían la misión de sabotear en la medida en la que pudiesen las instalaciones básicas y la reconstrucción de Curlayn. El mandato fue llevado a cabo por el alcalde de Idrinor, un Ser Hueco que controlaba con sus poderes a la población de dicha ciudad. A medida que avanzaron los días éstos mensajeros habiendo hecho parte de su trabajo y contaminando parte de los pozos perdieron la necesidad de realizar sus objetivos por la distancia que había entre su señor y la ciudad en la que estaba. Así pues, se dieron cuenta de la traición al imperio de Curlayn y decidieron no realizar el resto de sus objetivos.
Comerciantes:
Habiendo muerto la inmensa mayoría de los comerciantes de la ciudad o habiendo sido desaparecidos la venida de nuevos comerciantes a la ciudad era algo más que necesaria, así pues se reconstruyeron todos los negocios pero no habían nombrado un jefe del gremio. Un elfo forastero que ocultaba su presencia se hizo con el control del gremio, convenciendo tanto al rey como al resto de comerciantes. La taberna se reabrió, la herrería se reabrió y el resto de comercios surgieron con la llegada de nuevos habitantes la ciudad presionados fundamentalmente por los intereses de la familia de Yar Phalas.
Parthaes:
Los dos mensajeros de Parthaes, caballeros de la orden de caballería tenían por misión respaldar a su orden con el beneplácito del rey. El enfrentamiento con la casa de Ardas venía ya lejano y podía desembocar en una pugna. La resolución quedó en un estatus quo entre las dos órdenes militares debido a la delicada situación por la que pasa el imperio. El reconocimiento del rey a la casa y a las actividades que ha desarrollado durante los últimos 150 años también ayudan a mejorar la situación.
CONCLUSIÓN:
La Ciudad de Curlayn se hace fuerte y entabla negociaciones con elfos y enanos, siendo con éstos últimos las más fructíferas. La amenaza de los ejércitos enanos queda ya lejana y los ejércitos de Ardas pueden dedicarse a luchar contra las hordas de seres impíos venidos del norte. Narbell se hace cada vez más fuerte. La Sagrada Palabra vuelve a tener poder. Verlasha se hunde bajo el manto de la aparente descabezada Harikoon. Qaothem se vuelve más pura al ligar todavía más su linaje a la sangre real. Los enviados de las distintas ciudades realizan con mayor o menor grado de éxito los cometidos para los que habían sido enviados. Se reestablece la fuerza de la milicia con nuevos mercenarios y se abren en la poca medida en la que se puede las anteriores rutas comerciales. Finalmente el príncipe se casa y es coronado rey. Curlayn vuelve a ser un imperio que mantiene una batalla aún por decidir contra las denominadas hordas del mal.